Análisis de Chronos: Before the Ashes

Chronos: Before the Ashes, un viaje a través de cristales y espejos

Chronos: Before the Ashes, no es solo la adaptación del título de nombre ‘Chronos‘ que se lanzó para VR en el año 2016, sino que es la precuela de uno de los juegos revelación del año pasado, Remnant: From the Ashes, el cual a día de hoy ha vendido más de 2.5 millones de copias.

Con adaptación, no me refiero a que el título se haya fijado en el Chronos de 2016, más bien, es un calco exacto del título de VR, pero mejorando la vista en cámara y algún detalle más.

Jugabilidad con sus pros y sus contras

La jugabilidad de Chronos: Before the Ashes es un punto a debatir. Posee tanto aspectos positivos, como otros que dejan bastante que desear. Por ejemplo, el juego tiene claros problemas a la hora de ejecutar algunas animaciones. Rara vez, al atacar, nuestro personaje no le causará ningún tipo de daño al enemigo -aunque este no se esté cubriendo-. El combate es un poco pobre, pues no cambia desde el principio hasta el final, y la variedad de armas y escudos es escaza.

Además, el personaje da la sensación de lentitud, incluso cuando está corriendo. Esto muy probablemente se deba a que no querían que la gente sufriera mareos a la hora de jugarlo cuando era un título de VR.

También tiene problemas con la cámara, donde en ocasiones te obliga a mirar en sentido contrario al que tu deseas, o incluso, gira a tu personaje completamente sin que tú tan siquiera te estés moviendo -me pasa la mayoría de veces al subir escaleras-.

Pero sin duda, lo que más me molestó, fueron los golpes a través de las paredes. Pasa muy de vez en cuando de forma general, pero cerca del final del juego, hay unos ballesteros que te pueden dar a través de las paredes con sus flechas -y no es cosa de magia, sino que está mal hecho-.

Pero no todo es negativo. El sistema de puzles de Chronos: Before the Ashes es gratificante, y aunque no son muy complicados, si que te harán pensar e incluso estar varios minutos buscándole solución.

El sistema de curación funciona a base de corazones de dragón, los cuales no se recargarán hasta que mueras -tampoco se recargan al tocar ”hogueras”-. Pero ojo, estos corazones no son la única forma de curarse, cada vez que subes un nivel, tu barra de vida volverá al 100%.

Un NPC te otorga la posibilidad de usar magia. Esta magia impregna tu arma a la hora de usar el ataque fuerte, y no solo eso, sino que cuando esquives a tu enemigo -si es un esquive perfecto- también se impregnará durante un segundo.

Las ”hogueras” que en este caso, y al igual que en Remnant, son piedras, actúan como punto de reaparición y teletransporte, ni más ni menos. Además de estas piedras, hay una serie de espejos con runas que funcionan como portales, pero no entre zonas, sino entre lugares del mismo escenario en el que estés. Esto concretamente es algo que me encantó, ya que puedes teletransportarte desde un espejo, a uno más grande o más pequeño, con el consecuente aumento o disminución de tamaño del personaje.

¿Qué hay de su historia? y… ¿Son buenos sus gráficos?

Chronos: Before the Ashes te introduce de forma magnífica y muy bien narrada en el acervo de su historia. Nada más comenzar el juego, si has jugado a Remnant: From the Ashes, notarás que lo que te cuentan es muy familiar para ti.

A medida que avanzas en la historia, conoces a algún npc -no hay prácticamente-. Con la escasez de personajes que existe en el juego, la mayor parte del lore se nos muestra en una serie de textos, ya sean notas, libros o archivos de ordenador. De resto, la historia es algo en lo que por desgracia no se profundiza demasiado y acaba dejando algo que desear.

Poco más puedo contar de su historia sin entrar en el spoiler, pero si puedo hacerlo de sus gráficos. Visualmente Chronos: Before the Ashes no es una maravilla, pero sus entornos e iluminación corrigen cualquier otro aspecto. Para ser una adaptación de un título VR, está todo bastante logrado.

Eso sí, existen una serie de bugs de iluminación y de texturas que, aunque no molestan mucho, si que ocurren de una manera bastante asidua -no descarto que esto se corrija con una actualización-.

Personalización, habilidades y rendimiento

Chronos: Before the Ashes, al crear tu personaje, te deja elegir si quieres que sea femenino o masculino, si prefieres que lleve espada o hacha y los tres rangos de dificultad. Nada más. La personalización en la creación del personaje es nula.

Como comentaba en el apartado de jugabilidad, hay muy pocas armas y escudos. Esto no tiene porque ser algo negativo, pero cuidado, porque la mayoría de las armas están escondidas o no son fáciles de ver a simple vista.

No hay mucha más variedad de objetos. Aparte de armas y escudos, solo tenemos los consumibles y las piedras que te otorgan la magia. Dentro de los consumibles -aunque también hay algunos objetos claves aquí- existen objetos que pueden combinarse, ya sea para resolver puzles o para mejorar las armas.

Respecto a los atributos, dispones de cuatro (fuerza, agilidad, arcano y salud) y con cada nivel que adquieras conseguirás dos puntos para subirlos.

Las habilidades se adquieren de una forma curiosa. Realmente no son habilidades en sí, pero si que te otorgan un rendimiento extra. Estas no funcionan subiendo de nivel como los atributos, sino que las consigues al cumplir años. Sí… se puede cumplir años en el juego. El problema, es que para cumplir años en el juego tienes que morir, y no siempre tiene por qué ser beneficioso, pues cuantos más años tengas, menos agilidad y fuerza tendrás, pero más conocimiento de lo arcano.

En cuanto a rendimiento, no tengo ninguna queja del juego. Chronos: Before the Ashes va perfectamente fluido. En mi caso, con un PC de gama media (1070 y Ryzen 2700) jugué al máximo de fps que me ofrecía el título (129) y a la máxima calidad. Por si esto no fuera poco, y lo que me hace elogiar aún más el rendimiento del juego, fue que tuve que jugar en un portátil (i3 y 940m) una gran parte del tiempo -la key me la dieron 2 días antes y no tenía acceso al PC durante el fin de semana-. Sorprendentemente, en el portátil, el juego iba entre 45-60 fps, con bajones esporádicos y calidad media.

Conclusiones

Chronos: Before the Ashes es un título que si no tocaste en VR, y no sabías ni si quiera de su existencia, probablemente disfrutarás y te dará varias horas de diversión. Por si no fuera poco, te deja con unas ganas tremendas de rejugar Remnant.

Es un soulslike con mecánicas que innovan, pero con fallos que deben ser pulidos en actualizaciones.
Chronos: Before the Ashes es una buena adaptación, pero Gunfire Games podría haberlo hecho mucho mejor.

El juego estará disponible a partir del día 1 de diciembre en PC, PS4, Xbox One, Switch y Google Stadia.

Disclaimer: Se nos ha proporcionado una clave para la revisión de Chronos: Before the Ashes

[NOTA: 6,4]